viernes, 25 de marzo de 2011

ROTA CELEBRA UNA JORNADA JUBILOSA EN TORNO A LA CRUZ ANTES DE LA DESPEDIDA DE LA DIÓCESIS CAMINO DE CÁDIZ

Los estudiantes roteños han vibrado junto a los signos de la JMJ antes de que la parroquia de Nuestra Señora de la O acogiese el acto central en esta población

La última jornada de la Cruz de los Jóvenes y el Icono de María Santísima en la Diócesis de Asidonia-Jerez brindó la ocasión a la Villa de Rota, localidad de la zona pastoral del litoral, de sentir la invitación al Encuentro Mundial de la Juventud que constituye su presencia a lo largo de su recorrido por todo el país.

El instituto Arroyo Hondo se ocupó de recibirlos en la localidad y de generar el primer ambiente jubiloso que, más tarde, alcanzaría a sendos centros educativos salesianos, los colegios Nuestra Señora del Perpetuo Socorro (de las Hijas de Mª. Auxiliadora) y Virgen del Rosario (de los salesianos de Don Bosco).

Banderas rosicelestes (colores salesianos), niños vestidos de seises, signos visibles del JMJ como una pancarta, pequeños carteles o fotos del papa dieron colorido a unos momentos vibrantes en los que no faltó la suelta de globos amarillos y blancos en homenaje al pontífice que creó el Encuentro Mundial de la Juventud (Juan Pablo II) y el que en la actualidad lo convoca (Benedicto XVI).

Llamó la atención la entrada en el Ayuntamiento roteño (Castillo de Luna) cuando, camino de la parroquia de Nuestra Señora de la O, surgió esta posibilidad por deseo de la propia alcaldesa Eva Corrales, quien ya se sumó previamente a la fiesta estudiantil de los centros salesianos.

En la parroquia fue monseñor José Mazuelos Pérez, obispo diocesano, quien presidió la celebración de la Eucaristía que llenó el templo en el que, más tarde, continuó expuesta la Cruz y el Icono invitando a la oración hasta la marcha, posteriormente, a la cercana residencia de ancianos de las Hijas de la Caridad.

El muelle de El Puerto de Santa María, en la ría que hace el Guadalete en su desembocadura, ha brindado la última estampa en la Diócesis de Asidonia-Jerez, que lo recibió el pasado domingo en la desembocadura del otro río que dibuja su territorio, el Guadalquivir. Los frutos de la visita de la Cruz de los Jóvenes y el Icono de María Santísima invitan a la satisfacción con la que, en el Obispado, se producen primerizos balances.