jueves, 21 de julio de 2011

«La moral es el arte de vivir con dignidad»

El Obispo de Jerez de la Frontera, ha participado en el Curso de verano de la Fundación Universidad Rey Juan Carlos, de Madrid, con una conferencia titulada «Amor, sexualidad, matrimonio y familia: caminos para una civilización del amor».

“La moral es el arte de vivir con dignidad” ha manifestado monseñor Mazuelos, al tiempo que ha advertido de que la actual visión hedonista de la sexualidad hace que sea “más fácil romper un contrato matrimonial que darse de baja en Movistar”. Y ocurre que un niño puede tener hasta seis clases de padres o madres, sin tener en cuenta la visión antropológica de la importancia de la naturaleza de lo sexuado anterior a lo sexual.”

El Obispo de Jerez de la Frontera ha resaltado que el amor conyugal forma parte “del proyecto existencial que tiene el ser humano para alcanzar la plenitud como persona”. En palabras de monseñor Mazuelos, el amor, la familia y la sexualidad nunca son neutrales, no dependen de uno mismo, y únicamente pueden alcanzarse desde la práctica de la moral y no del consenso porque “no existe la neutralidad ética”.

Además, ha denunciado que hoy “somos invitados al sexo por la industria, en la que se juega una cantidad de intereses económicos que nada tienen que ver con la realización de la persona.” Y es que, en palabras del prelado, “el sexo está reducido a bien de consumo, empobreciendo la sexualidad a la fuente de dominio que dirige las conductas desde las ideologías de género, desde la genitalidad, sin que otras dimensiones de la persona intervengan.”

Asimismo, ha hablado de la relación entre el matrimonio y la familia en la civilización del amor. Y apelando al beato Juan Pablo II ha destacado que “el alma de la civilización del amor es la cultura de la libertad” y que para alcanzarla es necesario asumir un nuevo estilo de vida que se manifieste en poner como fundamento de las decisiones concretas una justa escala de valores Entre estos valores resalta “la primacía del ser sobre el tener, de las personas sobre las cosas, y de la armonía del ser con el existir”.

Al referirse a la vida humana, monseñor Mazuelos sostiene que “es una ilusión pensar que podemos construir una verdadera cultura de la vida humana si nosotros no aceptamos y experimentamos la sexualidad, el amor y la vida entera de acuerdo a su verdadero significado y su profunda relación”.

Ante la inminente celebración de la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ), el prelado ha advertido de que la Iglesia tiene ante sí el reto, que ya tuvieron los Corintios, de traer una nueva evangelización en la que sea posible construir en libertad una civilización del amor que fomente el humanismo , el bien común y la justicia en nuestra sociedad".

La civilización del amor y no condenando porque no consiste en condenar a lo otro, consiste vivir en positivo , consiste en que nosotros descubramos el tesoro que tenemos con Cristo que es posible encarnar ese amor de Dios manifestado en Cristo Jesus, porque estoy seguro –concluyó- de que cuando aparece ese amor encarnado entusiasma todo y a todos les gusta entrar por ese camino de la civilización del amor porque la civilización del amor viene marcada en la razón de todo hombre, creado a imagen y semejanza de Dios”.